Masajes para embarazadas: ¿es malo sobarse en el embarazo?

Masajes para embarazadas: ¿es malo sobarse en el embarazo?

A partir del segundo trimestre del embarazo puedes recurrir a los masajes para embarazadas. Además de ayudar a una buena circulación y bajar los niveles de ansiedad, los masajes son mimos para el bebé y para la futura mamá.

A partir del segundo trimestre del embarazo puedes recurrir a los masajes para embarazadas. Pero, la pregunta es ¿es malo sobarse en el embarazo? La respuesta es no, los masajes pueden ayudar a una buena circulación y bajar los niveles de ansiedad, además de convertirse en mimos para el bebé y para la futura mamá.

Si estás ansiosa, te pesa la barriga, estás cansada y notas las piernas pesadas, lo mejor es tomar una sesión de masajes para embarazadas. Son ideales porque no afectan a tu embarazo o a tu bebé y ayudan a mejorar la circulación sanguínea que tanto se perjudica durante estos meses. También son excelentes para reducir el estrés y los nervios normales de cualquier mamá primeriza.

Antes que nada, es bueno que consultes con tu obstetra por si existe algún inconveniente a la hora de disfrutar de una relajante sesión de masajes. Durante el primer trimestre de embarazo es recomendable que esperes un poco antes de comenzar con ellos. En cambio, en el segundo y el tercer trimestre, cuando la panza ya se hace notar y si tu embarazo es normal, no habría problema en disfrutar de un buen masaje.

¿Es malo sobarse en el embarazo?

Lo principal es elegir un profesional especializado, que tenga experiencia en masajes de este tipo. Suelen usar unas almohaditas para que te sientas muy cómoda en la camilla y resultan mejor si te pones de costado, para no presionar al bebé y facilitar la circulación. Las técnicas más placenteras y efectivas son la reflexología (en los pies), el drenaje linfático y el masaje descontracturante, entre otras opciones que puedes elegir.

¿Por qué son buenos los masajes para las embarazadas?

Los beneficios son múltiples:

  • Son descontracturantes,
  • Calman los calambres típicos del embarazo,
  • Reducen la tensión muscular,
  • Ayudan a reducir el cansancio y a eliminar la ansiedad.

El drenaje linfático, en especial, es ideal para combatir y prevenir las várices y la celulitis. Además, ayudan contra la constipación, otro problema que también suele afectar a las embarazadas. En síntesis, una caricia para ti y tu bebé.

Antes que recurrir a cualquier tipo de masaje, pregunta a tu médico si estás en condiciones de hacerlo. Él debe ser tu guía a la hora de elegir el mejor para ti y tu bebé.

¿Por qué se presenta la infección vaginal en el embarazo?

Durante los meses de gestación, se producen cambios en el pH vaginal. Por esta razón, los especialistas consideran que es la etapa más vulnerable para la proliferación de bacterias.

Durante los meses de gestación, se producen cambios en el pH de la mujer, por esta razón, los especialistas consideran que es la etapa más vulnerable para la proliferación de bacterias, es decir, de una infección vaginal en el embarazo.

El embarazo representa un período de cambios para toda mujer. Es una etapa en la que todo se modifica. Desde las variaciones más perceptibles como la ansiedad y el aumento de peso hasta alteraciones del organismo poco conocidas, como las infecciones vaginales.

El papel de las hormonas y la infección vaginal en el embarazo

Durante los 9 meses de gestación, el nivel de hormonas femeninas cambia y afecta directamente al pH del área genital. En lo cotidiano, el pH de la zona vulvar es ácido e inferior al de otras partes del cuerpo, y se sitúa en un rango de 3.8 a 4.2, con la finalidad de impedir el crecimiento de bacterias.

Durante el embarazo la futura mamá protagoniza diversos cambios hormonales que comprometen directamente la capa protectora ácida. De esta manera, la variación a un pH mayor a 4.2 puede alterar el equilibrio en detrimento de la flora habitual, lo que deja espacio a la proliferación de gérmenes patógenos. Por esta razón, los 9 meses de gestación representan una de las etapas más vulnerables de la mujer para adquirir infecciones del tracto ginecológico.

Cómo protegerse de una infección vaginal en el embarazo

Es necesario que toda mamá tome cuidados especiales para mantener su zona íntima limpia y protegida durante esta importante etapa de la vida.

Entre las principales recomendaciones se encuentran:

  • Usar ropa interior de algodón.
  • No utilizar ropa muy ajustada o de materiales sintéticos.
  • Lavar la ropa interior con jabón de barra y enjuague, sin dejar residuos.
  • Lavar la zona íntima con un jabón especial con pH ácido que limpie, hidrate y ayude a prevenir infecciones del área vulvoperineal.
  • No se recomienda utilizar desodorantes íntimos, talcos, aromatizantes ni sales de baño o burbujas.
  • Evitar traumatismos de la región genital como el rasurado, la depilación o fricción.
  • Si se observan cambios en el flujo vaginal, prurito, ardor o mal olor, no automedicarse y consultar al ginecólogo u obstetra.